El tarot de Marsella nació en el norte de Italia en el siglo XV, es antecesor de los naipes y mantiene con ellos una estrecha relación. Por la época de la que data, se considera que el diseño de sus cartas tiene rasgos medievales. Por sus trazos y colores, también se le atribuyen influencias del diseño al arte del vitral gótico. Mantiene la misma estructura del tarot convencional, de hecho, da origen a este. Se introdujo en el sur de Francia en 1499 cuando conquistaron Milán y Piamonte. El catolicismo lo persiguió durante años, pero se mantuvo hasta nuestros días.
Estructura
Cuenta con 78 cartas, y dos grupos, arcanos mayores y arcanos menores. Dentro de sus cartas mas conocidas se encuentran el Papa, el emperador, el colgado y la muerte. A través de los años, los diseños, así como el significado de algunas cartas han cambiado, pero se ha respetado la estructura hasta el día de hoy. Es muy popular en Europa y sus lugares de origen, donde más se practica el tarot convencional y el tarot del amor. Su importancia radica en el aporte invaluable que este realizó a las técnicas de adivinación actuales.
Los Arcanos Menores constan de 56 cartas, estos a su vez están divididos en cuatro palos. Bastos, espadas, copas y Oros, van del As (1) al 10. Existen cuatro figuras alegóricas para cada palo, Sota, Caballo, Reina y Rey. Los Arcanos Mayores son un total de 22 naipes numerados, inicia con “el Loco” es una carta que no está numerada, es decir que van desde el 0 hasta el 22. Aunque es el tarot más antiguo y da origen a muchos, cuenta con muchas diferencias. Dentro de lo que hace que este sea distinto, encontramos la figura de algunas cartas pero que total, significan lo mismo.
Significado
Las cartas tienen puntos clave para poder interpretarlas, una de ellas es la figura central que normalmente viene acompañada con un fondo. Mientras que, en el mazo del tarot habitual, se divide en tres planos: el superior que hace referencia a lo espiritual, medio alusivo a lo mental e inferior que da a conocer lo terrenal. En el mazo del tarot de Marsella el fondo cambia, se asocia con situaciones más dadas a la naturaleza, la noche o el día. Otro aspecto son los colores de los naipes.
El celeste habla sobre asuntos divinos y espirituales, el azul sobre lo oculto y lo receptivo, el verde tiene énfasis con la fertilidad. El amarillo da información acerca de la riqueza y conocimiento, el rojo es el color del fuego. El blanco hace relación con la pureza, el marrón a las características terrenales y el violeta la sabiduría. Una de las perspectivas que ofrece esta modalidad, es la de poder cambiar el presente y en consecuencia mejorar el futuro. Ofrece una visión de hechos que ocurrirán pronto ya sea en el amor, salud o trabajo, lo que da la ventaja de tomar las riendas del destino a nuestro favor para evitarlos o atraerlos hacia nuestras vidas.